Ruta de Cañada Real Mesta (Tres tramos diferentes)
Lorem fistrum por la gloria de mi madre esse jarl aliqua llevame al sircoo. De la pradera ullamco qué dise usteer está la cosa muy malar.
Descripción
La Cañada Real de la Mesta recorre la comarca en sentido oeste- este. A esta importante via pecuaria se unen otras que conectaban los Pedroches con el norte y el sur.
Aunque en algunos puntos ha sido invadida o ha habido apropiaciones ilegales, en la mayor parte de su trazado conserva las noventas varas castellanas originales (algo más de 75 metros). No es difícil seguir esta vía pecuaria ya que aparece janolada en buena parte por las antiguas cercas de piedra o por recientes alambrados.
TRAMO 1:
El recorrido se inicia en Hinojosa del Duque, en la que es imprescindible visitar sus importantes monumentos. Aunque podemos optar por seguir en dirección norte, la Cañada Real de la Mesta se desvía a unos 600 metros en dirección noreste para describir una ligera curva hasta cerca de la ermita de Santo Domingo. A partir de aquí nos dirigimos hacia las Casas de Torretejada. Desde este cortijo en Adelante podemos apreciar claramente la anchura de la Cañada.
En esta zona donde podemos contemplar a finales del otoño e invierno bandas de grullas, de chorlitos dorados, de avefrías, y con algo de suerte, avutardas.
En el embalse del Arroyo del Fresno podemos deleitarnos contemplando numerosas cigueñas blancas, aves acuáticas, y tratando de descubrir la presencia de nutrias. El antiguo vado del Guadamatilla ha sido anegado por el embalse de la Colada por lo que es necesario cruzar a través de la presa. A partir de ella podemos continuar por la Cañada o por la carretera de servicio, que sigue su trazado, hasta la N-502.
TRAMO 2:
Desde la N-502 la Cañada Real de la Mesta nos conduce hasta El Guijo, donde se unirá, como dijimos anteriormente, con la Cañada Real Soriana, para seguir un trazado común que nos llegara hasta el limite con la provincia de Ciudad Real.
En el inicio del recorrido nos encontramos con varios cortijos y caminos de servicio, pero la Cañada aparece perfectamente definida, tanto por las paredes de piedra o alambrada, como por las abundantes retamas que ocupan su superficie. El paso por el Arroyo Cigueñuela puede ser complicado si la temporada se ha presentado lluviosa.
A uno 4 Km. de la N-502 la Cañada se cruza con dos importantes vías pecuarias (también señalizadas y descritas) y con el camino que conduce a El Viso. Hasta el cortijo de la Dehesilla, la Cañada esta bien conservada, pero a partir de este se pierde en varios tramos, lo que hace difícil seguirla, máxime cuando en algunos lugares su espacio ha sido aprovechado para sembrar.
En el punto marcado con «2», una alambrada nos da paso de nuevo a la Cañada perfectamente delimitada y cuyo trazado esta marcado también por las retamas.
Abundantes pájaros (currucas, carboneros, harrerillo, mirlos, abubillas, alcaudones comunes, etc.) rapaces como los milanos y ratonero y cigueñas nos acompañan a lo largo de nuestro caminar.
TRAMO 3:
Al llegar a El Guijo debemos recorrer la carretera que bordea el pueblo por el norte y llega hasta la CV-312. Desde un antiguo vertedero, ya clausurado, empezaremos la tercera y ultima etapa por la Cañada Real de la Mesta, ya de trazado común con la Real Soriana, hasta la ermita de la Virgen de Veredas.
El primer tramo ha fácil de transitar por el, pero al coronar la loma parece cortarse bruscamente en una cerca de piedra. A partir de aquí la Cañada discurre entre cercas de piedras y alambradas y aparece nítida a lo largo de las continuas lomas y vallecillos, cubierta por retamas y monte bajo. Destaca entre los encinares adehesados que la bordean. Tan solo entre la azud del Arroyo del Figueral, junto a las Lagunas del Ochavillo, y el vértice geodesico de Carrascales se difumina algo mas el trazado.
Al llegar al Arroyo Repereza, hemos de seguirlo agua arriba hasta llegar la vado, a un centenar de metros aproximadamente. La Cañada, a partir de aquí hasta la ermita de la Virgen de Veredas esta en perfectas condiciones de transito, aunque la anchura original no es fácil de apreciar.
A lo largo del camino, ademas de abundantes pajarillos, podemos observar buitre leonados y negros, águilas perdicera, culebra imperial, cigueña negra. Rastros de jabalíes, jinetas y nutrias también son fáciles de apreciar.